En estos últimos años, el ser humano se encuentra atrapado por el materialismo, la competencia, injusticias, dolor y crisis mundiales.
Sintiéndose ahogado por toda esta problemática inicia la búsqueda de un camino de ayuda espiritual y es allí donde redescubre sus raíces espirituales soslayadas por el vertiginoso mundo del siglo XX.
Es este el momento donde se percibe a nivel universal el renacimiento de la verdadera existencia de estos seres celestiales divinos... “los ángeles”

Protegen nuestra luz interior, nos alertan en momentos de peligro siempre están dispuestos a servirnos de acuerdo a nuestras necesidades y nos acompañan para concretar nuestros potenciales en todos los niveles.
Expanden el espíritu de la vida y renuevan todo lo que tocan.
Son la manifestación de amor divino, de la sabiduría y del poder absoluto.
Están en el mundo por millones de años antes que el ser humano.
Su función es concentrar, intensificar y amplificar las energías de Dios en beneficio de toda la creación, atendiendo las necesidades de la humanidad, exaltando los sentimientos de fe, esperanza, caridad, honor, integridad, verdad, libertad, misericordia y justicia.

Tienen la capacidad de adoptar diferentes formas para presentarse ante nosotros cuando es necesario.

Los ángeles son seres que brindan un servicio a los hombres y a la naturaleza, en pos de la evolución de la humanidad y de todo lo que nos rodea.

Muchas veces nos hablan a través de nuestros propios pensamientos, aunque no nos demos cuenta.
Ellos forman parte del “YO SUPERIOR” que es con lo que nos conectamos en esos momentos de necesidad inminente